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| Matthysse entrenando nada más y nada menos que con el legendario Látigo Coggi |
Se trata de la primer chance mundialista del argentino. Ninguna de las peleas estelares en las que participó hasta ahora tenían en juego un cinturón por el campeonato mundial. Recordamos que tanto contra Zab Judah como contra Devon Alexander fue robado por parte de los jueces. Lucas había vencido con claridad en ambos combates pero en las tarjetas se dieron dos de los resultados más vergonzósos de los últimos años en detrimento del chubutense. Sin embargo Matthysse dio vuelta las circunstancias volviendo a ponerse en el primer plano de la categoría tras vencer a un histórico como Humberto La Zorrita Soto el pasado mes de junio y por knockout. Lucas es uno de los boxeadores más infravalorados de la actualidad, y sin embargo es visto por la mayoría de los especialistas en el deporte como uno de los tipos que más espectáculo dan, al ir a buscar el terminar por la via rápida todas y cada una de sus peleas. Su récord lo deja bien en claro, con 29 de sus 31 peleas ganadas habiendo concluido por KO. El oriundo de Trelew está a una pelea contra una superestrella de convertirse en una cara reconocible del deporte, ya que, apenas se le de la oportunidad, se premiará su esfuerzo, su capacidad, su trabajo, y también su voluntad de ir para adelante en toda ocasión (algo que siempre es bien visto).
Ajose Olusegun esta en una situación similar a la de su par argentino. A diferencia de Matthysse el nigeriano nunca fue robado (se encuentra invicto), pero si viene buscando una oportunidad mundialista o al menos contra un nombre de primer nivel desde hace ya varios años. Todos los grandes nombres de la división Superligero le han estado esquivando. Lo mejor que puede encontrarse en su curriculum es el ignoto Ali Chebah, un boxeador decente pero que nada tiene que hacer al lado de muchos de los nombres que ha enfrentado Matthysse, léase Judah, Alexander, Soto o incluso Chop Chop Corley, un veterano contendiente que fue despachado con suficiencia por el argentino en el Polideportivo Vicente Polimeni de la localidad de Las Heras en Mendoza, uno de los grandes centros boxísticos del país en la actualidad.
A diferencia del chubutense, Olusegun no tiene la mano pesada para nada, con un porcentaje de knockout menor al 50%. Sin embargo tiene una gran velocidad a la hora de lanzar golpes, y se planta con mucha seguridad ante sus oponentes.
Puede argumentarse que se pone a pelear a estos dos entre sí puesto que son boxeadores de gran nivel pero que no tienen aún un nombre labrado y de esta forma libran a los más marketineros como Danny García, Amir Khan o Erik Morales de combatir contra el africano o el argentino
En definitiva, se trata de otra gran oportunidad para Matthysse de mostrar su valía en los Estados Unidos, especialmente ahora que la pelea principal de la noche, Devon Alexander vs. Randall Bailey se cayó luego de que el segundo adujera una lesión en la espalda. De esta forma el argentino y el nigeriano protagonizarán la velada principal de la noche, recordando que para ambos es la primer oportunidad de sus carreras de combatir por un título mundial. Pero igual de importante son las puertas que este enfrentamiento abrirá en un futuro. Lo más probable es que el vencedor se enfrente a la nueva gran estrella de la división Superligeros, el joven y ascendente boricua Danny García, quien noqueó al promisorio Amir Khan y que habrá de enfrentarse con la leyenda viva del boxeo Erik el Terrible Morales.
La categoría tiene muchísimos nombres para dar show. Es hora de que Matthysse se consolide entre los mismos.
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