miércoles, 11 de abril de 2012

¿Quién es el más grande, Floyd Mayweather o Manny Pacquiao?

Durante el transcurso de la última década ha surgido un interrogante que ha dividido a la gran mayoría de los aficionados al boxeo y que lamentablemente nunca ha podido ser dirimido sobre un ring. ¿Quién fue el mejor boxeador libra por libra de estos últimos 10 años? ¿El eléctrico filipino Manny Pacquiao (con récord de 54 victorias, 38 de ellas por knockout, 3 derrotas y 2 empates) o el escurridizo norteamericano Floyd Mayweather Jr (invicto con 42 peleas ganadas, 26 de ellas antes del final). Pasen, vean y juzguen.

A favor de Floyd Mayweather Jr: 

Pretty Boy Floyd era, hace 10 años, ya toda una estrella en el firmamento boxístico. Para ese entonces tenía 25 años y ya había conseguido alzarse en dos ocasiones con el título mundial Superpluma, tras vencer al mexicano Genaro "Chicanito" Hernández, y al hasta entonces invicto Diego Corrales, en lo que fue una verdadera demolición round a round del mexicano-estadounidense. Esta es una gran ventaja de Floyd, el arrancar el periodo a tener en cuenta ya metido en el corazón del mundo del boxeo.
Mayweather se destaca por ser un verdadero virtuoso técnicamente, pero muy particularmente esplendiendo en el apartado defensivo del deporte. Al mismo tiempo que es extremadamente complicado para sus rivales el conseguir acertar un golpe contra él, es capaz de contragolpear con una facilidad pasmosa y una fuerza que suele se subestimada por los contrarios (con resultados desastrozos para ellos). Floyd es dueño, además, de una dedicación increible al entrenamiento. Si, innegablemente es un talentoso, pero además es un tipo que va por la vida pesando prácticamente lo mismo que debe pesar a la hora de combatir. Nadie puede decir que vaya a pelear mejor entrenado que él, y eso es algo que se nota, especialmente cuando a una edad avanzada no se ve ni un ápice de debacle física en el estadounidense.
Un dato extra: según Compubox, Mayweather es el púgil que, en la historia del boxeo, ha sido golpeado con menor porcentaje de precisión, y que con mayor porcentaje ha acertado en sus oponentes. Por encima de Joe Louis, Sugar Ray Robinson, Muhammad Ali, Rocky Marziano, etc...

Poco más puede decirse realmente de un tipo que ha conseguido semejante cantidad de títulos desde una edad tan temprana y viendo que en toda su carrera jamás perdió ni empató siquiera una sola vez. A esto se le suma que, aunque no es tan "popular" en el buen sentido como Pacquiao, la realidad es que se trata del hombre que mayores ventas de suscripciones "pay per view" logra en el mundo entre los boxeadores en actividad, poseyendo el récord histórico en este sentido con su pelea contra Oscar De La Hoya.
A lo largo de la década Money May consiguió títulos mundiales en cinco pesos distintos: Superpluma, Ligero, Superligero, Welter y Superwelter, venciendo en el camino a Carlosel Tata Baldomir, Super Zab Judah, Oscar de la Hoya, Ricky Hatton, Juan Manuel Márquez, Sugar Shane Mosley y Arturo Gatti.





A favor de Manny Pacquiao:

Nunca, absolutamente nunca nadie en la historia del boxeo escaló divisiones manteniendo la velocidad, la explosión, el aura de imbatibilidad, la eficiencia y el poder de golpe de la forma en la que lo hizo el filipino Emmanuel Dapidran Pacquiao a lo largo de su carrera. The Fighting Pride of the Phillippines ha sido el primer boxeador de la historia en conseguir títulos mundiales en 8 categorías diferentes, consiguiendo el cinturón en los pesos Mosca, Supergallo (salteándose Supermosca y Gallo), Pluma, Superpluma, Ligero, Superligero, Welter y Superwelter. Pasar de pelear pesando 51 kilogramos a 67 kilogramos y mantenerse como uno de los más temidos pegadores es un logro que probablemente nunca vuelva a ser alcanzado por boxeador alguno.
A todo esto se suma el hecho de que siempre, siempre, el Pac-Man ha sido un tipo que ha priorizado el dar espectáculo arriba del ring. Con un estilo vistoso, yendo siempre al frente buscando llevar la iniciativa de cuanto combate protagonice, el filipino se ha convertido en el ícono mundial del boxeo en la actualidad, el único tipo reconocible por gente que no es afin al deporte, y un hombre que ha sabido transformarse en diputado en su país natal y en una de las caras de la empresa Nike. Su potencia, garra y actitud encaradora, sumada a una velocidad que le da una gran ventaja respecto de sus oponentes (la mayoría siempre superior en peso y tamaño) son la marca registrada del oriundo de Kibawe.
Su carrera está llena de sagas sorprendentes y emocionantes. Saltó a la fama como The Mexican Killer (o el menos inspirado The Mexicutioner), luego de vencer a las tres grandes leyendas aztecas de los últimos tiempos, Marco Antonio Barrera (el que se la hizo caber al Príncipe Naseem Hamed), Juan Manuel "Dinamita" Márquez y Erik "El Terrible" Morales (con quien perdió su primera pelea, la última vez que Pac-Man fue derrotado, en 2005). Peleó tres veces con Dinamita y tres veces con El Terrible, pero además destrozó a Antonio Margarito (arruinándole en el proceso la órbita de un ojo), a Ricky Hatton (retirándolo) y a Oscar de la Hoya (también mandándolo derecho a cobrar la jubilación) de forma espectacular. Estos tres oponentes se vieron completamente superados por el pequeño filipino. Pero su más brillante victoria fue la que consiguió frente al boricua Miguel Cotto. En un recital boxístico como pocos, Pacquiao despachó al puertorriqueño con un impactante TKO en el último asalto, luego de 12 rounds de dominio absoluto.





En contra de Floyd Mayweather Jr:
En primer lugar cierta falta de constancia, y no en calidad. Durante el último lustro Mayweather ha coqueteado muchas veces con el retiro, manteniéndose alejado del ring durante periodos demasiado largos de tiempo (por ejemplo peleó tan solo 4 veces en los últimos 5 años). Claramente esto no significó que abandonara el entrenamiento (su estado físico, condición y reflejos siguen siendo superlativos), pero no deja de ser una lástima que un tipo de su categoría desperdicie tanto tiempo en cualquier otra cosa que no sea buscar lo máximo que pueda dar en su finito periplo como profesional.
Otra cosa que suele achacársele es el hecho de que sus victorias contra rivales de mayor fuste no han sido tan claras como muchas de las que ha logrado Pacquiao. Contra De La Hoya logró tan solo una decisión dividida (Pac-Man lo hizo abandonar luego del octavo asalto), Hatton lo llegó a poner en aprietos (el filipino lo destruyó en 2 rounds) y Mosley llegó a hacerlo tambalear al comienzo del enfrentamiento (mientras que contra Pacquiao se dedicó solo a huir).
Por otro lado decíamos que se trata de un tipo mucho menos "popular" en el buen sentido que Pacquiao, teniendo en cuenta que arrastra muchísima gente... pero que solamente espera y desea verlo perder. Su estampa de "tipo malo" dentro del boxeo actual, boqueando de forma perenne, siempre agrandado, mostrando las apuestas descomunales que realiza semanalmente, habiendo sido encontrado culpable de los cargos de violencia doméstica de los que se le acusaba (y que le granjearán 90 días de cárcel) hacenq ue sea muy difícil sentir cualquier tipo de simpatía por Money May. Es mucho más complicado encontrar fans de Floyd en relación a prácticamente cualquier otro boxeador de primer nivel. Comercialmente le sirve, puesto que sigue vendiendo muchísimo a través del odio, pero no deja de ser una contra a la hora de buscar alguien que lo defienda.
Otra razón por la que no es tan popular es por su estilo de combate, extremadamente efectivo, pero poco atractivo a la vista. Mayweather es un virtuoso defensivo que se dedica a esperar y contraatacar. No se desespera en ningún momento, lee las peleas como nadie, y nunca comete errores sobre el ring, y esto, en gran medida, es lo que ha hecho que mantenga su impoluto récord. El tema es que, en el futuro a casi nadie le va a interesar volver a ver peleas del estadounidense, mientras que ver los combates de su archirrival filipino da realmente gusto, al ser estos verdaderos festivales de piñas y castigos de proporciones bíblicas.
Por último siempre se lo culpabilizó de que no pudiera llegarse a un acuerdo entre él y Pacquiao para arreglar una pelea, puesto que siempre exigió dos cosas: recibir una suma mayor a la del filipino (algo en realidad justo si se tiene en cuenta que Mayweather genera mucho más dinero en cada pelea) y que Pac-Man se realice controles antidopings de tipo olímpico (algo que le costó otra demanda a Mayweather por difamación).




En contra de Manny Pacquiao:
Primero y principal decíamos, como crítica a Floyd, que Manny ha hecho mejor muchas de las cosas que ya había hecho el norteamericano. El tema es... que Mayweather ya las había hecho. No era muy complicado encarar a Ricky Hatton cuando este ya estaba invicto, o a De La Hoya cuando no había podido contra Money May.
Ya que hablamos de De La Hoya tenemos que entrar en LA gran crítica que se le ha hecho a lo largo de su carrera profesional a Pacquiao. Comentamos como nunca nadie en la historia del deporte logró escalar divisiones como lo hizo el filipino. Bueno, el tema es que contra muchos de sus rivales más grandes (en tamaño y categoría) Pacquiao y la gente que maneja su carrera lograron acordar que los combates se lleven a cabo no en divisiones específicas sino en lo que se denominan "catchweights". Un ejemplo: Miguel Cotto, aquel al que el filipino venció en su máxima y mejor demostración boxística, debió bajar a 145 libras (dos libras por debajo del límite Welter, pero 5 por encima de la división Superligera) para poder enfrentar a Pac-Man, cuando todas sus peleas posteriores serían en la división Superwelter (154 libras). Oscar De La Hoya, con 35 años y al borde del retiro, debió bajar también a las 145 libras, siendo que la última vez que había peleado en ese peso había sido... en 1997. Con Margarito sucedió algo similar. El mexicano expuso su título Superwelter, es decir, en las 154 libras, pero el acuerdo hizo que la pelea se llevara a cabo en 150 libras. De esta forma el filipino se aseguró que todos estos rivales, de mucho mayor tamaño que él, es cierto (y de mucho mayor peso, luego de la rehidratación previa a la pelea), hubieran sido drenados de parte de su energía y poder de golpe. Es cierto que el entrenado por Freddie Roach debe seguir una dieta especial para llegar a las 147 libras de sus últimos combates (mientras los demás suelen tener que esforzarse para bajar de peso en vistas a la pelea), pero aún así no deja de ser una crítica más que válida.
Por último, siempre se ha señalado la mala performance del Pac-Man en su trilogía contra Juan Manuel Márquez, que finalizó con un empate y dos victorias para el filipino, mientras que es considerado que Dinamita venció en una o tal vez dos ocasiones que le fueron arrebatadas por los jueces. Acá el temita es que Mayweather se enfrentó una vez con el mexicano y lo venció sin ningún pasar ningún tipo de apuro por decisión unánime.





Veredicto: 
Como decíamos, contra rivales en común generalmente Pacquiao lo ha hecho mejor, aunque Floyd brilló contra Márquez, la gran piedra en el zapato del filipino. Por otro lado el palmarés de Pac-Man es bastante superior al del estadounidense, más aún tenienendo en cuenta que podría haber obtenido títulos en otras dos categorías en las que no compitió. Lo cierto es que si tomamos la carrera, puede impactar mucho más todo lo que ha logrado The Fighting Pride of the Phillippines, a pesar de lo mucho que le pese a Money May con su tan querido récord invicto. Y aún así, en el caso de que se enfrentaran (hoy, hace 2 años, 4 años o en el futuro) el ganador del combate sería sin lugar a dudas el norteamericano. Mayweather plantearía sin inconvenitentes el mismo tipo de pelea que Dinamita Márquez realizó para cagarle la vida a Pacquiao. Esperando el error. Contragolpeando. Ralentizando la pelea con toda la paciencia del mundo. Pac-Man vería enfrente a un tipo con reflejos muy superiores a los de cualquier otro rival que haya tenido, y terminaría cayendo en las tarjetas.





Si tomamos los títulos como indicador, lo de Manny es irrepetible.
Si tomamos el récord de victorias y derrotas, no hay tipo, hoy por hoy, como Floyd Mayweather.
Si tomamos el aspecto literario de la historia, el ascenso de la pobreza a la gloria, las grandes sagas boxísticas contra rivales legendarios, la carne de mito, el ganador es Pacquiao.
Si tomamos como saldría una pelea entre ambos, no cabe duda que el victorioso sería Money May.

La historia se encargará de dirimir la cuestión.

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